español » coreano | 55 [cincuenta y cinco] | Trabajar

55 [쉰다섯] 일하기

55 [swindaseos] ilhagi

¿Cuál es su profesión?	직업이 뭐예요?; jig-eob-i mwoyeyo?
Mi esposo ejerce como doctor.	우리 남편은 의사예요.; uli nampyeon-eun uisayeyo.
(Yo) trabajo media jornada como enfermera.	저는 파트타임 간호사예요.; jeoneun pateutaim ganhosayeyo.
Pronto recibiremos nuestra pensión.	우리는 곧 연금을 받을 거예요.; ulineun god yeongeum-eul bad-eul geoyeyo.
Pero los impuestos son altos.	하지만 세금이 많아요.; hajiman segeum-i manh-ayo.
Y el seguro médico es caro.	그리고 건강보험이 비싸요.; geuligo geongangboheom-i bissayo.
¿Qué te gustaría ser?	당신은 나중에 뭐가 되고 싶어요?; dangsin-eun najung-e mwoga doego sip-eoyo?
Me gustaría ser ingeniero.	저는 엔지니어가 되고 싶어요.; jeoneun enjinieoga doego sip-eoyo.
(Yo) quiero estudiar en la universidad.	저는 대학에 가고 싶어요.; jeoneun daehag-e gago sip-eoyo.
(Yo) soy un / una pasante.	저는 인턴이에요.; jeoneun inteon-ieyo.
(Yo) no gano mucho dinero.	저는 많이 벌지 않아요.; jeoneun manh-i beolji anh-ayo.
(Yo) estoy haciendo una pasantía / unas prácticas en el extranjero.	저는 외국에서 인턴을 해요.; jeoneun oegug-eseo inteon-eul haeyo.
Ése es mi jefe.	이분이 제 사장님이에요.; ibun-i je sajangnim-ieyo.
(Yo) tengo buenos compañeros de trabajo.	저는 좋은 동료들이 있어요.; jeoneun joh-eun donglyodeul-i iss-eoyo.
Siempre vamos a la cantina al mediodía.	우리는 늘 정오에 식당에 가요.; ulineun neul jeong-o-e sigdang-e gayo.
Estoy buscando trabajo.	저는 일자리를 찾고 있어요.; jeoneun iljalileul chajgo iss-eoyo.
Llevo un año ya sin trabajo.	저는 실업자가 된 지 이미 일 년 됐어요.; jeoneun sil-eobjaga doen ji imi il nyeon dwaess-eoyo.
Hay demasiados desempleados en este país.	이 나라에는 실업자가 너무 많아요.; i nala-eneun sil-eobjaga neomu manh-ayo.

Palabras largas, palabras cortas

La longitud de una palabra depende de su contenido informativo. Así lo ha revelado un estudio americano. Los investigadores analizaron palabras de diez lenguas europeas. Esto se hizo con la ayuda de un ordenador. A traves de un programa, el ordenador analizó diferentes palabras. Con un algoritmo calculó el contenido informativo. Los resultados fueron claros. Cuanto más breve es una palabra, menos información transmite. Resulta interesante saber que utilizamos las palabras breves más a menudo que las largas. Este hecho está relacionado con el fenómeno de la eficiencia lingüística. Al hablar, nos concentramos en lo importante. De manera que las palabras que no contienen mucha información no pueden ser demasiado grandes. Así se garantiza que no perdemos demasiado tiempo en cosas sin importancia. La correlación entre extensión y contenido tiene más ventajas. De ese modo se verifica que el contenido informativo siempre permanece constante. O sea, que en un período determinado de tiempo transmitimos la misma cantidad de información. Podemos, por ejemplo, usar unas pocas palabras grandes. O también, por el contrario, utilizar muchas palabras cortas. Tanto da lo que elijamos: la cantidad de información permanece constante. El resultado final es que nuestro lenguaje tiene un ritmo uniforme. De esta manera se le facilita la tarea a quienes nos escuchan. Si la cantidad informativa variase de cada vez, aumentarían las dificultades. Nuestros oyentes no se adaptarían bien a nuestra conversación. La comunicación sería, entonces, más difícil. Quien quiere ser comprendido correctamente, debe elegir palabras cortas. Pues las palabras cortas se comprenden mejor que las de mayor extensión. Como se dice en inglés: Keep It Short and Simple! En suma: KISS!